Exposición individual de la artista  Conchi Álvarez.  Del 24 de  junio  al 2 de agosto de 2017

En 2012 la galería ya expuso una individual de la artista, “Mujeres pasionales, mujeres de Pasión” compuesta por 17 pinturas, óleos sobre lienzo y acrílicos sobre tabla, en las que se recorría la profundísima dimensión que tiene el mundo femenino a través de la pasionalidad y la Pasión. En la muestra se establecía un diálogo entre la mujer como hembra pasional, y la mujer como ente religioso; la coexistencia y ambivalencia entre una mujer sabedora de su propio erotismo y sensualidad, como emisora sexual de forma consciente o inconsciente, pero al mismo tiempo, mujer de Pasión, devota y fiel de un ámbito más que trascendente, relatando, a lo largo de las 17 obras, esa casi imposible coexistencia pacífica entre pasionalidad y religiosidad.

En esta ocasión, la artista y comisaria continúa adentrándose en el complejo mundo femenino, planteando a la mujer flamenca como paradigma de la mujer andaluza. Son 14 pinturas, óleos sobre lienzo, acrílicos sobre tabla, y también cinco apuntes realizados en acrílico sobre papel. En ellos apreciamos una mujer creativa, sensible, pasional, con los miedos, anhelos y aspiraciones de cualquier mujer. El comienzo de la serie fue “El Ritual de la Mujer”, un ritual que se ha desarrollado en todas las culturas y que, en el caso de la mujer flamenca, tiene una plasticidad y belleza espectaculares. Fue algo natural, dado que la artista reside en Andalucía. La primera aproximación al tema fue por la belleza plástica que despliegan las mujeres flamencas en los días de feria. Las calles y plazas, pero sobre todo, los recintos feriales de toda Andalucía se llenan de mujeres flamencas radiantes de colorido, semejando flores meciéndose con gracia infinita. “Flor morada”, una de las obras expuestas, pertenece a la variante de esta serie, dedicada a las mujeres-flor.

La serie ha ido profundizando en el interior femenino y la autora ha ido indagando en cuestiones cada vez más complejas: para qué ese ritual, para quien, por qué… ahora mismo el trabajo está generando obras en las que, unas veces la mente, otras, las más, el corazón de la mujer flamenca, hace su propia catarsis preguntándose acerca de sí misma, acerca del ser amado, dudando, burlándose, desgarrándose… y ya no es más sólo la mujer flamenca, pues pasa a representar, en realidad, al género Mujer.